Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la obesidad infantil es un fenómeno que afecta a 124 millones de niños y niñas de entre 5 y 19 años en todo el mundo. Concretamente en España, 1 de cada 3 menores de entre 8 y 16 años presenta sobrepeso u obesidad según el estudio PASOS (2022) de la Gasol Foundation.

Una de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para frenar esta otra pandemia es prohibir la promoción de alimentos no saludables dirigidos a niños. La OMS reconoce que la publicidad en TV influye en las preferencias alimentarias y en las pautas de consumo de la población infantil. Por lo tanto, regular este marketing debe ser prioritario para las instituciones.

Según la OMS, la promoción de alimentos y bebidas para niños se centra principalmente en productos ricos en grasas de mala calidad, azúcares y sal añadidos, lo que contribuye a una mala calidad de la dieta y a la alteración en la percepción de sabores.

Desde la Universidad Miguel Hernández se ha realizado un estudio analizando la publicidad de más de 3.000 alimentos, de los que 563 van dirigidos a niñ@s y adolescentes. De ellos, el 97% SE CLASIFICARON COMO NO SALUDABLES. Eso quiere decir que tenian muy poca calidad nutricional además de ser ricos en azúcares libres y sal por ejemplo. Por el contrario, muy pocos de los que sí son saludables se "etiquetaban" para niñ@s o adolescentes, como pueden ser las legumbres, frutos secos al natural, pescado...

Por ello, os aconsejamos mantener una actitud crítica ante la comida "para niñ@s", pues suelen ser productos hiperpalatables que sobreestimulan su gusto. La comida realmente saludable es igual para todos, y tanto adultos como pequeñ@s pueden disfrutarla de la misma manera. No existe comida para niñ@s.